sábado, 18 de junio de 2011

Ser Médico

Aquí dejo una perla que escribí hace años mientras estudiaba Medicina. A veces lo repaso para exigirme más en mi trabajo...




   Algo que se acerca y da pereza, dejar por fin de ser adolescente (que está dicho que se deja de ser cuando te emancipas), el ser médico. Pronto podría o debería serlo. Y no sé si seré buen médico, espero que no me falte la atención y dedicación a las personas, y que Dios me conserve y fortalezca ese don con cariño.
   Y es que la mejor arma contra las enfermedades y contra las guerras es el amor. Quiero ser el médico que cure con las palabras, no quiero caer en saco roto. No quiero ser una máquina expendedora de medicamentos, no me interesa el dinero ni el poder y espero que así siga siendo. En fin, intentar ser lo más humilde posible. De chico quise ser Arqueólogo Paleontólogo, ¿que iba a suponer eso? Tratar con seres de hueso, pero yo lo que quiero es tratar con seres de carne y hueso. Y para eso hace falta mucho amor, mucho corazón. Dios, dame amor…
   Yo sólo quiero llegar a ser médico…